Hoy en día entender una operativa como la nuestra sin QuadMinds, es como pensar que puedes cargar un camión a mano. Sería impensable.
En un entorno competitivo donde los márgenes comerciales se estrechan día a día, el sector de la distribución de alimentos y bebidas debe abandonar la planificación de repartos mediante procesos manuales si quiere ser eficiente.
En QuadMinds tenemos experiencia en ayudar a este tipo de empresas y hemos pedido a Daniel Rodríguez, CEO del Grupo BAI Logística, que nos cuente como se desarrolló el proceso de transformación digital en su empresa con nuestra plataforma.
El grupo BAI está formado por 3 empresas; Bai Logística, Conurbano Distribución y Distribuidora Norte. El producto principal que distribuyen es cerveza y además reparten bebidas y productos de marcas como: P&G, Pernod Ricard, Baggio, Pepsico.
QM: ¿Cómo gestionaban la logística antes de contar con QuadMinds?
Daniel Rodríguez (D.R.): Antes de incorporar QuadMinds armábamos la planificación de forma manual. Colocábamos un mapa de calles en un mural, se localizaban los clientes y se pinchaba una chincheta en su ubicación, para luego determinar el orden de las visitas. A partir de ahí se confiaba en la experiencia profesional del conductor, quién conocía las calles, los clientes, los horarios, las incompatibilidades… cada conductor tenía su zona de reparto y solo él era la persona adecuada para gestionarla. Esta no era una solución escalable para nuestro negocio, siendo que dependíamos del conocimiento del conductor para planificar las entregas.
QM: ¿Qué mejoró cuando empezaron a utilizar la plataforma QM?
D.R.: Con la implantación de la plataforma QuadMinds lo primero que hemos logrado resolver fue la optimización de los recorridos de entrega y no depender exclusivamente del conocimiento del conductor. Por otro lado, los conductores instalaron la aplicación de Certificación de entregas en sus teléfonos, donde comenzaron a recibir una hoja de ruta con el orden de las visitas y la ruta más corta para llegar al cliente. Ese cambio fue uno de los más importantes. Lo siguiente fue el aprovechamiento eficiente de las entregas. Antes enviábamos a un distrito un camión de reparto con una bodega medio vacía.
Gracias a la geo-codificación de los clientes y el re-ordenamiento de la zona a través de QuadMinds, ahora podemos cargar los camiones con la bodega completa, bien por el número de clientes a entregar, bien por el volumen de la mercancía. Esto permite aumentar las entregas, sumar rentabilidad y también bajar los costes.
Gracias a la geo-codificación de los clientes y el re-ordenamiento de la zona a través de QuadMinds, ahora podemos cargar los camiones con la bodega completa, bien por el número de clientes a entregar, bien por el volumen de la mercancía.
También fue un gran cambio, tener la visibilidad completa del negocio que nos proporcionó la tecnología QuadMinds. Ahora evitamos que «nos cuenten las cosas». Las vemos por nosotros mismos, sabemos donde están los puntos críticos de mejora y actuamos para conseguirlo, tomando medidas en tiempo y forma. Además, a través de soluciones de Track & Trace, también proporcionamos al cliente acceso a la información en tiempo real sobre la llegada de la mercancía y la posibilidad de dar Feedback a la empresa sobre la gestión del pedido, con lo que el número de reclamaciones ha disminuido drásticamente.
También fue un gran cambio, tener la visibilidad completa del negocio que nos proporcionó la tecnología QuadMinds. Ahora evitamos que «nos cuenten las cosas».
QM: ¿Cómo afectó al personal el cambio a esta nueva tecnología?
D.R.: La plataforma es muy intuitiva y no requiere personal experimentado para ello. Los mismos empleados que antes trabajaban de una forma, ahora pasan a trabajar con la herramienta QuadMinds. Además, ya no necesitan preocuparse de atender el teléfono, contactar al cliente, generar informes…, sino que se concentran en realizar las tareas marcadas por la aplicación. Hoy en día entender una operativa como la nuestra sin QuadMinds, es como pensar que puedes cargar un camión a mano. Sería impensable.